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    ¿Divorcio laboral? Una oportunidad para emprender

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    Por Abg. Cristhian Y. Miranda Rivas HEMISFERIO JURIDICO LABORAL

    Este artículo es parte de la 7ma Edición. Descarga aquí

    Memorándums de agradecimiento de servicios incoando motivos de fuerza mayor, fundamentados por el impacto económico en las empresas causado por la pandemia y la declaratoria de cuarentena nacional, no constituyen un hecho aislado en nuestro País, sino una constante determinación de los empleadores en la actualidad quienes sorteando los efectos posteriores y el alcance de la estabilidad laboral garantizada por la Constitución Política del Estado en su artículo 48, cruzan los dedos y realizan despidos masivos buscando paliar las consecuencias económicas negativas que vienen atravesando, no obstante y por otra parte la figura desgastada de nuestras autoridades con un discurso engañoso y a través de la promulgación del D.S. 4199 y siguientes, la reciente promulgación de la ley 1309 que prohíbe los despidos durante la cuarentena y adicionando a ello un par de comunicados de las jefaturas de trabajo que no tienen rango de ley, intentan generar tranquilidad en la ciudadanía, entre comillas “garantizando la estabilidad laboral” como si fuese algo nuevo, estas disposiciones resultan meramente un recordatorio de aquella garantía ya consignada en nuestra Constitución Política del Estado.

    Lo cierto y evidente es que la situación se ha salido de control. Aunque aún no existen cifras oficiales actuales en cuanto a la tasa de despidos en el país, no hace falta ser adivino para decir que miles o cientos de miles de trabajadores se quedarán sin empleo durante y una vez finalizada la cuarentena y aunque nuestra normativa de acuerdo al D.S. 28699, prevé para aquellos trabajadores que hayan sido despedidos por causas no contempladas en la norma, la posibilidad de optar por una reincorporación laboral a través de ciertos mecanismos que se activan a denuncia de parte ante el Ministerio de Trabajo, no es menos cierto que cuando existe una ruptura de la relación laboral ésta desencadena a su vez otro tipo de desavenencias. En este caso se afecta las relaciones interpersonales en muchos casos a tal punto que tanto para el empleador como para el trabajador se hace imposible restablecer un buen ambiente laboral, por consiguiente el trabajador opta por aceptar el despido.

    Es entonces donde se sufre de ciertas etapas: Negación, te rehúsas aceptar que fuiste despedido y buscas la forma de cambiar la situación para recuperar tu puesto de trabajo a toda costa; Inestabilidad Emocional, la situación actual te supera; Temor y tristeza al pensar en cuál será tu nueva fuente de ingresos, la tristeza por tu situación actual y el temor al futuro se apoderan de tus pensamientos; Reflexión, meditar el hecho de que probablemente ese trabajo de años te hacía realmente infeliz y por último Aceptación, cuando empiezas a pensar que no todo está perdido y que de alguna forma fue lo mejor que pudo pasarte.

    ¿Qué sigue?, un nuevo cuestionamiento invade tus pensamientos, el despido trajo consigo unas ganas de emprender y dejar de lado la subordinación y el trabajo por cuenta ajena pero por otra parte el miedo al fracaso limita tus pensamientos.

    La realidad es que puedes elegir culpar al mundo de tu “mala suerte” o puedes tomar ese hecho como un reto cargado de oportunidades. Recuerda que muchas de las cosas del entorno no las podrás controlar, pero lo que sí puedes controlar es la manera cómo afrontar estas situaciones, es entonces donde empiezas a entender que el divorcio laboral te está dando la posibilidad de aventurarte en el mundo del emprendimiento.

    Aunque hay personas que desde muy jóvenes tienen claro que su futuro pasa por el emprendimiento, hay otras que necesitan atravesar algunas experiencias como un despido para darse cuenta que en el emprender está su futuro. Existe una incontable cantidad de personas que han pasado por la misma situación incluyendo a muchas celebridades como por ejemplo:

    Walt Disney

    Hoy en día es imposible hablar del cine de animación sin pensar en él. Walt Disney tardó un tiempo en lograr convertirse en el referente que todos conocemos en la actualidad. Su carrera comenzó en un periódico del cual fue despedido en 1919 porque su editor consideraba que tenía poca imaginación y malas ideas.

    Poco tiempo después se trasladó a Hollywood con su hermano y comenzó a producir los dibujos animados que le han hecho tan conocido.

    J.K. Rowling

    En la actualidad es muy poca la gente que no conozca el nombre de la autora de la saga de Harry Potter. Sin embargo, su vida profesional no siempre fue exitosa.

    Rowling fue despedida de la oficina de Amnistía Internacional en la que trabajaba como secretaria por incompetente. Lejos de dejarse arrastrar por ese fracaso utilizó el dinero de la indemnización de su despido para poder escribir las historias que la han hecho conocida.

    Jack Ma

    Hoy lo conocemos por ser el dueño del gigante del e-commerce Alibaba. Sin embargo, antes de llegar a fundarlo, Ma encadenó una larga serie de fracasos, tanto en sus estudios como en sus trabajos previos, llegando a ser despedido incluso de un McDonald’s.

    Thomas Edison

    Edison trabajaba para Western Union y su espíritu de inventor lo motivaba a realizar experimentos en la oficina. En 1867 derramó un poco de ácido causando daños en el piso y se vio obligado a abandonar su empleo.

    Ser despedido lo motivó a seguir inventando a tiempo completo. Dos años más tarde consiguió su primer patente y comenzó su camino hacía el éxito y hacía la riqueza.

    Todo el mundo recuerda a Thomas Edison como uno de los más grandes inventores de la historia.

    Probablemente tu futuro no sea tan exitoso como el de estas celebridades o tal vez sí, pero créeme que ahí afuera existen millones de personas que han encontrado el nivel de vida deseado acompañado de la felicidad en el emprendimiento cuando entendieron que el estar amarrado a un empleo los hacía infelices.

    Si has decidido emprender déjame darte unos consejos y llenarte de motivación:

    Haz un análisis FODA de ti mismo

    • Haz un análisis FODA de ti mismo e identifica tus fortalezas y debilidades, así como las oportunidades y amenazas que hay en el mercado. Debes saber muy bien cuáles son tus habilidades, experiencia y para qué eres bueno y en especial qué te apasiona. Probablemente la experiencia en tu anterior trabajo puede guiarte a convertirte en tu propio jefe en el mismo rubro si es algo que verdaderamente te apasiona.

    • Aprovecha tu tiempo libre para generar ideas e investigar el mercado, te sorprenderás cómo las ideas emprendedoras se adueñan de tu modelo mental, cuando la mente se despeja y dejas espacio a la imaginación muchas cosas pueden pasar. Antes de iniciar cualquier negocio, asegúrate de que exista un mercado potencial que compraría tus productos o servicios.

    • Utiliza el tiempo para reunirte con personas clave que te pueden orientar en la puesta en marcha de tu proyecto o idea de negocio.

    • Capacítate, hoy en día existen varios cursos de capacitación gratuitos en la web que son una buena solución cuando no se cuenta con el dinero necesario para esta inversión.

    • No es necesario tener mucho dinero para emprender, puedes ajustar tu presupuesto a tu idea de negocio. Algo que debes tener muy en cuenta es que la mayoría de los emprendedores comienzan desde abajo con un producto mínimo viable.

    • No emprendas solo por necesidad, muchas veces el mundo del emprendimiento está plagado de sacrificios, pérdidas y frustraciones antes del éxito. Cuando la necesidad es tu único estímulo el primer obstáculo puede derrumbarte, pues la necesidad bloquea la resiliencia. Pocos están dispuestos a pagar el precio de convertir una idea en un negocio y el negocio en una empresa próspera y rentable en el tiempo a pesar de los obstáculos.

    • Emprender requiere dedicación, es preciso evaluar tus propios anhelos antes de ingresar al mundo empresarial. Es preciso comenzar respondiendo honestamente qué te motiva a querer emprender, debes preguntarte si ¿Estás dispuesto a perder días y largas noches para crear un negocio propio? ¿Conoces los problemas, compromisos y responsabilidades de esta decisión?, cuestiónalo.

    La crisis que genera el coronavirus está modificando nuestro entorno y cambiando el mundo pero no solo para mal, a lo largo de la historia el ser humano se ha caracterizado por reinventarse ante los efectos adversos que han generado gran impacto en la sociedad. No es secreto que existen muchos obstáculos para los emprendedores en nuestro País, por la carga social, impositiva y la falta de leyes que apoyen al emprendedor, no obstante siempre es el tiempo adecuado para visualizar cada crisis como una oportunidad para emprender. El empleo seguro dejó de ser una realidad y debemos ser conscientes de que las oportunidades laborales son limitadas y generalmente menos convenientes para el empleado. La mejor opción actualmente es redescubrir nuestras pasiones y dedicarnos a ellas… ¿o quieres pasar toda tu vida trabajando por los sueños de otra persona?

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